PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS
Los celtas llegaron a
Centroeuropa y se asentaron en la península ibérica.
Primero se asentaron en
la zona norte y más tarde entraron en contacto con los iberos y la fusión entre
los dos se ha llamado la cultura celtibérica.
Los asentamientos
celtibéricos evolucionan desde los castros hasta la aparición de las ciudades a
partir del S.III A.C.
Los castros son poblados
amurallados que se levantan en las cimas de los montes. Sus construcciones son
de planta circular. Solían tener estancias únicas hechas con paja y barro o
mampostería.
Escultura.
Está representada
fundamentalmente por los verracos, figuras de piedra que representan a cercos,
toros y jabalíes. Talladas en bloques de granito. La postura siempre es de pie
y frontal. Presentan cierta tosquedad y esquematismo en las formas.
Orfebrería
Predominan las armas y
los objetos de adorno personal ya que corresponde a grupos nómadas y guerreros.
Durante el periodo final
de la edad del bronce existen tres corrientes culturales que
forman el estrato en el que se desarrollan estos tres estilos artísticos.
En primer lugar un
sustrato local identificado con la cultura del
yacimiento de Cogotas (Avila)
cuyas características son la práctica del rito de inhumación, lugares de culto
en zonas abiertas, denominadas Nementon y cerámicas decoradas incisas y
excisas.
En segundo lugar la
cultura de los campos de Urnas,
procedente de Europa que se extiende por el noroeste de la península. Sus
rasgos más notables son el ritual de cremación para los enterramientos y su
deposición en una urna, formando extensos cementerios.
Y por último la influencia de los Tartessos.
Se situaron en torno a la cuenca del Guadalquivir. El control y explotación de
los metales proporciono grandes riquezas y beneficios a los Tartessos. Destacan
las estelas funerarias de guerreros, de carácter honorifico.
Rocío F.
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